Trabajos de la Asociación YIHDES

Alberto Martorell: “El Decreto Supremo N° 007 dice textualmente que el sitio declarado pero no delimitado requiere una resolución ministerial que active la presunción”– Segunda Parte

Por: José Samuel Querevalú

En esta oportunidad, la asociación YIHDES, entrevistó al abogado Alberto Martorell Carreño. Él es doctor en Derecho de la Cultura por la UNED – España y con Maestría en Economía y Administración del Patrimonio Cultural por la Universidad de Catania - Italia. Además es coordinador de la Maestría en Conservación y Gestión del Patrimonio en la Universidad Nacional de Ingeniería y profesor en la Maestría de Museología y Gestión del Patrimonio en la Universidad Ricardo Palma. Ha escrito diferentes artículos y libros relacionados con la defensa del patrimonio cultural, y desde el 2012 viene ejerciendo el cargo de Presidente del Consejo Internacional de Monumentos y Sitios, ICOMOS – Perú.



En octubre el Ministerio de Cultura promulgó el Decreto Supremo 007-2017-MC, sabemos que está solicitando su derogación, ¿puede brindarnos detalle sobre los alcances de este mecanismo  y cómo este afectaría a los sitios arqueológicos que aún no han sido declarados patrimonio cultural?

Que aún no han sido declarados y los declarados que no cuentan con plano aprobado que ya es increíble. Previo a este decreto ya se han dado dos o tres resoluciones viceministeriales inexplicables, y justo por eso decía, el enemigo del patrimonio está atrincherado en la asesoría legal del Ministerio de Cultura. Se dieron dos resoluciones ministeriales cuyos casos: uno es el cementerio arqueológico de Chilca, que no está declarado ni delimitado, pero que cuenta con investigaciones desde 1963. El particular dice que no sabía, no tenía referencia, no había avisos, no había nada, entonces no le pueden culpar dentro de lo que se puede pensar correctamente. Botaron al antiguo equipo de defensa del ministerio, lo ocultaron, y llega la resolución viceministerial cerrando el caso indicando que es un imposible jurídico sancionar al alguien si es que el sitio no está declarado y delimitado; por lo tanto nunca habrá sanciones.
Los que informaron que no se podía aplicar la presunción han actuado contra la práctica del propio ministerio, que en muchos casos, ha sancionado lugares que ni siquiera sabía que existían, no lugares investigados como este, pero que eran evidentemente arqueológicos y la gente no reaccionó proporcionalmente hasta la destrucción, y se les ha sancionado porque la presunción permite esa protección genérica para todos los casos.    

Con la resolución viceministerial no se puede sancionar a alguien en caso de un bien presunto, esa era una primera campanada de alerta, pues se fueron contra la presunción sin decretos supremos aun. Después hay un caso más curioso que es Pampa de las Cuevas, en el norte de Lima, Este sitio está declarado pero no delimitado, mientras en el caso anterior hubo estudios hasta de la UNMSM, y otro punto era que resulta inconcebible que al firmar una resolución que además de decir que no se puede sancionar y todo el ministerio no ha completado el proceso de declaración. En los años 60 se investigó y ¿todavía no estaba terminando el trámite?, debería estar la sanción paralela a esa, ya perfecto no quieres sancionar al particular, lo sancionas al funcionario que ha omitido funciones y que en 50 años no ha podido declarar.

En el siguiente caso hubo estudios de Engels con planos y todo, no tan antiguos con 20 años, pero pese a estar declarado si no está delimitado no hay forma que el particular sepa cuál es el lugar y por lo tanto es imposible jurídicamente sancionar aunque el bien está declarado.

Caso exacto de Ventarrón, el sitio está declarado pero no delimitado y eso pone en evidencia la intención de tergiversar la información del ministro. Porque el ministro se presenta en Ventarrón y dice: denuncio, que venga la fiscalía. La fiscalía no va a poder hacer nada porque el ya firmó el decreto supremo, aún más grave que el caso anterior, porque ahora hay un decreto supremo que avala el proceso. Y el decreto supremo dice textualmente que el sitio declarado pero no delimitado requiere una resolución ministerial que active la presunción que declare la presunción del bien presunto. Entonces, el ministro hace un show cuando dice que va a sancionar, claro podría sancionar, tiene funcionarios que permitieron que solo haya dos personas sin ningún nivel técnico a cargo de un sitio de la magnitud y antigüedad de Ventarrón. Así que alguien es responsable de eso, han usado materiales inadecuados, alguien es responsable administrativamente de no completar racionalmente la planificación de la zona. Y de ahí que venga a decirnos que van a sancionar a los de Pomalca cuando sabe que, aunque hubiese sido con soplete, por su responsabilidad ya no hay forma de sancionarlos, no reconoce ninguna culpa interna para proteger a su viceministro y su director general del patrimonio, ni los ha llevado.
Él se siente intocable porque es el actor que está actuando de ministro, entonces es mucho más sutil su posición, pero los otros si tienen responsabilidades concretas y tenían que dar respuestas concretas, ni aparecen, ni una sola declaración. El decreto supremo ha permitido esa situación, necesitan resolución de protección provisional los bienes presuntos no declarados, o sea los que realmente son o eran presuntos de acuerdo a la constitución. Necesitan una resolución viceministerial para que puedan protegerse, defenderse, investigarse, toda la parafernalia; y tienen la posición cínica de decir que eso no afecta a los bienes presuntos porque la protección sigue vigente a todos los bienes presuntos, algunos provisionalmente los protegemos un poquito más.

Pero lo que dice la norma que, de los bienes presuntos, eligen algunos para ponerlos en condición de protegidos provisionalmente. Si unos están protegidos y eso activa el sistema de defensa, los demás están en situación de nada. He elegido uno y otro, esos tendrán una protección plena, los demás no tienen ningún tipo de protección. Entonces tiene ese vacío, pone un trámite totalmente engorroso para esa presunción de emergencia porque exige un informe previo que tendrá que ser por un informante nombrado por el Director General del Patrimonio, el Director General de Museos o el Director General de Arqueología. O sea, los directores generales van a nombrar, en todo el Perú, quien va a hacer el informe; solamente la designación es un trámite engorroso. Luego va al sitio y hace el informe, y lo eleva. Si es que estamos hablando de una Dirección Desconcentrada, el arqueólogo o el técnico que haga el informe lo eleva a su director, el director lo elevará al director de la Dirección Desconcentrada. El director de la Dirección Desconcentrada lo va a elevar al director del Patrimonio Arqueológico o General del Patrimonio y ese lo va a elevar al viceministro. Para hacer su resolución, el viceministro tendrá que consultar a sus abogados, que además son expertos en enredar, así que va a salir su resolución publicada en El Peruano y no se entiende por notificado. Han dicho que la resolución se tiene que notificar individualmente pero para poder notificar individualmente tienes que saber quién es el dueño del terreno. En muchos casos no hay idea, entonces van que tener que ir a registros públicos a comprobar si el bien está inscrito con nombre de alguien, ubicarlo y notificarlo personalmente.

En ese momento se podría decir que está protegido, pero esa protección no es para cualquiera, es única y exclusivamente para caso de peligro o de estado de destrucción. Y es de oficio, o sea si tú eres arqueólogo y no trabajas en el Ministerio de Cultura, antes cogías el teléfono y llamabas a la Dirección de Defensa y era obligación de ellos, activar, mandar un arqueólogo, llamar a la policía, lo que fuese, algo tenían que hacer. Podían tardar porque no tienen mucho personal, pero ahora no están obligados a responder porque la función de ese proceso es de oficio. No tenemos derecho los particulares de hacer nada. Si caigo donde un buen funcionario, él se sentirá tocado y de oficio se moverá y de repente si es de la zona, lo mandarán o mandarán a otro y será toda la historia larga que hemos visto. Pero si caemos en un funcionario que no le da la gana o no tiene tiempo para atender todas las llamadas que recibe, ahí quedo la cosa. Finalmente, también se aplica para bienes muebles, lo que significa que los cientos de miles de materiales culturales de cualquier época, hoy en día son igual que esta taza y si yo rompo esta taza me castigan tanto como si rompiera un huaco. Porque también piden que tenga declaración provisional los bienes muebles por resolución viceministerial y solo cuando están en caso de peligro. Ni un ministro que quiere proteger piza por pieza en un museo no podría porque no está en peligro. Lo que lo hace estar en peligro seria al huaquero con un pico a punto de romperlo y para el extranjero, decirle que esto se presume que es patrimonio genérico es un concepto genérico pero si se le dice que hay dos cosas de la misma antigüedad, esta tiene resolución y esta que yo he sacado de mi país no tiene -son igualitas en valor, del mismo sitio- ¿por qué me van a decir que yo no puedo sacarlas si la otra que no se puede sacar tiene resolución?, la que he sacado es un bien libre y si demuestran que es patrimonial, uno diría: yo lo saqué de buena fe.

Si el Estado que tiene arqueólogos, expertos, laboratorios, drones, satélites no ha sido capaz de decirme si esto es patrimonio o no, yo pobre mortal he salido con mi huaquito en la mano porque me pareció bonito, me van a decir que soy un ladrón. No, yo lo saque de buena gente, no me pueden culpar de eso y la ley internacional lo protegerá. Porque la buena fe es un principio jurídico mundial, se protege. Y si se demuestra que es muy importante, la persona puede decir yo he gastado en pasaje, lo he comprado y justo ahora un comprador quiere pagarme esta cifra, si tú me pagas más que eso la entrego, porque yo no he robado nada a nadie… hay que agradecer mucho a Salvador.

¿Qué intereses considera que se están jugando alrededor de este decreto?

Me imagino que el tráfico ilícito de bienes culturales por un lado. Yo creo que lo de la leche Gloria es francamente sospechoso. La leche Gloria ha destruido un sitio arqueológico inmediatamente después del decreto. Antes del decreto se iban presos, en ese nivel de magnitud podían haberse llegado ir presos, ahora nada. No es lo mismo el campo de caña o coles que hay al costado de un sitio arqueológico en valor legal, jurídicamente. Les han creado las condiciones para eso y para mi francamente me parece sospechoso la empresa Gloria, por ejemplo. O pueden ser las empresas de gas que están financiando los proyectos “bonitos” que está haciendo este Ministerio. Lo de Ayacucho y su plan puerto de cultura está financiado por empresas del gas y estas tienen miles de millones en juego de trazado de gaseoductos donde tienen que pagarle a un arqueólogo. Entregarle 10 o 20 millones que le han, por ejemplo para uno de los proyectos, al ministerio y después yo creo que tiene precio, es como lo de Odebrecht.

Por eso el principio universal que tiene la UNESCO es de no recibir donaciones de empresas extractivas, ni petroleras ni mineras ni de ningún tipo porque después es compra de conciencia.  Cuando viene el momento de elegir patrimonio u oro o petróleo, le dice: “yo te estoy financiando, tu sueldo sale de mis arcas, encima que yo he sido tan generoso con el patrimonio ahora voy a quebrar porque no me permites buscar un punto intermedio, una solución”.  Se va comprando, no digo que sea necesariamente corrupción abierta pero son formas de corrupción al fin y al cabo. Una empresa que tiene interés en autorizaciones del Ministerio de Cultura no debe financiar y también la gestión cultural, en ese sentido, pues resulta muy tendenciosa, muy fácil. Lo ha demostrado Odebrecht financiado a los periodistas por ejemplo, no porque los periodistas se estén vendiendo por ello, pero Odebrecht si les están comprando aunque ellos no lo sepan. Porque en el momento oportuno dirán “oye yo he hecho esto y lo otro y tú vas a venir a acusarme”, entonces un buen periodista define las cosas y los hace pero muchos se van a frenar. Es forma de comprar conciencia aunque la conciencia no está en venta, o sea hasta ese punto llega. Yo no digo que Salvador sea corrupto pero la forma de llevar las cosas entra dentro del sistema de corrupción.

De otro lado, hace poco fuimos testigos del lamentable incendio ocurrido en Huaca Ventarrón. Al ser este un sitio respaldado por la investigación y el financiamiento de la Unidad Ejecutora Naylamp - Lambayeque, ¿Cuál es su opinión sobre el papel de estas unidades frente a la protección del patrimonio?

Las Unidades Ejecutoras fueron en teoría la mejor noticia que hemos tenido en mucho tiempo. En la práctica, lamentablemente, tenemos el manejo político poniendo a gente con poca capacitación específica en el campo de patrimonio. Cosa diferente ha pasado en Caral, ya que se mantiene como tal en la práctica con todos los problemas que tiene; pero digamos, que el compromiso de fondo es que lo dirige alguien que maneja el patrimonio. Puede haber varias cosas criticables pero la esencia es alguien que apuesta por el patrimonio. La forma de unidad, si funcionaría bien, es interesante porque de alguna manera hay que descentralizar el ministerio. La gran virtud de la Unidad Ejecutora es que no es totalmente dependiente del ministerio y al mismo tiempo no es dependiente de la región. Porque lamentable, como funcionan las cosas en nuestras regiones, si la Dirección Desconcentrada fuera una parte del gobierno regional pondría a alguien que esté totalmente de acuerdo con sus planes y si se opone lo sacaría. La Unidad Ejecutora es una costa intermedia, tiene capacidad de ejecución, tiene un presupuesto asignado, no depende de la región, no totalmente dependiente del ministerio como las DDC e independiente territorialmente.

La idea no es mala, solo que no se ha fortalecido el tema profesional. Tal vez faltaría especificar que la persona a cargo debe tener algún tipo de especialidad. Y es que hemos magnificado una suerte de capacidad de gestión para ver un tema técnico, pero en patrimonio y cultura es un tema de valores, no solo es de gestionar por eficiencia en pasar rápidos procesos. No es lo mismo tramitar una autorización de investigación en las Pampas de Nazca que en la selva peruana donde las comunidades están vivas. Aunque podamos ver una terraza en ambos lados, no significará lo mismo para ambos casos ya que puede ser un lugar sagrado como un montículo más. Entonces se necesita tener un profundo compromiso cultural de la mano de la capacidad de gestión. Hemos tenido el gran defensor del patrimonio y no queda de huella de su paso sin reforma o cambio, por lo tanto hay que formar expertos en cultura con capacidad de gestión y poner requisitos. El ministerio debería capacitar una región por año para que los gobiernos locales actúen en favor del patrimonio, la gente actúa en contra porque no entiende la fuente posible de desarrollo.
Pero si se capacita y se incentiva, rápidamente serán los primeros defensores del patrimonio y ahí hay capacidad de gestión del ministerio.         

Estamos a cuatro años del bicentenario del país. ¿Cuál sería el panorama que se tendría para el sector cultural y legal si las cosas siguen con el rumbo actual?

Yo lo veo muy triste. No veo que haya un gran plan para el bicentenario. Algo ha empezado hacer el congresista Sheput, creo que ha tenido una cierta energía pero está en medio de un terreno tan difícil. Hace poco estaba en una oficina del ejército y me comentaron que hace poco habían creado una comisión que a estas alturas ya era tardísimo pues debió crearse hace 6 años. La gran perspectiva, supuestamente es el Museo de la Nación pero este es un proyecto más tirado de los pelos, no responde a procesos. Pero eso significa gestionar valores, cuántos peruanos saben que se está construyendo un museo así en Pachacamac, debió haberse debatido en las ciudades a los diversos medios de comunicación y generar la reacción. No saben qué van a exhibir ni tiene un plan museológico, es posible que lo inventen al momento. Entonces, lo que podría ser la revolución del cambio político cultural en el Perú se está desperdiciando tontamente porque un Museo Nacional debería motivar a una buena parte del país, por lo menos para el mundo universitario debería haberse mostrado la maqueta. Debería haberse hablado para que sea un proyecto para recuperar cultura y un espacio de encuentro. Yo creo que al final van a corregir la situación, pero que quieran separar a estas alturas arqueología de periodos posteriores en el museo, a mí me parece francamente absurdo. Un museo era la oportunidad de generar el encuentro y la identidad que tanto nos falta.       

Alguna reflexión final…

El tema de compromiso sería la reflexión, ya que si bien no podemos pedir que esto sea como otros países, que han alcanzado una conciencia de su ser social muy fuerte, por lo menos debemos dejar la situación de confort que tenemos. Lo puedo reclamar de mis colegas universitarios, muy fácil criticar dentro el aula o quedarse callado para que me puedan dar un puesto en el ministerio. Para quedar bien no me enemisto de alguien que está bien posicionado, socialmente es un problema y es más cómodo simplemente. No he visto más de tres profesores universitarios que han estado en una protesta de temas de cultura. No se puede cambiar las cosas sino se tiene una posición integral con respecto a las cosas. El discurso no basta, es algo mucho más complejo, hay que mojarse y en las condiciones que nos ha puesto el DS N° 007 es todo, o nos dedicamos a otra cosa porque esto es lapidante, no sé si se dan cuenta.